Imagina que tienes la tarea de determinar cuáles son las preferencias que tienen tus clientes respecto a ciertos tipos de productos que ofrece tu empresa y definir si existen segmentos distintos respecto al consumo, les aplicarías un cuestionario para saberlo ¿cierto? Mediante el uso del análisis factorial serías capaz de simplificar los datos obtenidos en las respuestas del cuestionario al identificar dimensiones subyacentes y con el análisis discriminante podrías clasificar a los consumidores por sus hábitos de consumo.