Negociación y persuasión: el no por el sí

Tipos de negociación

Existen diversos formatos para cada tipo de negociación de acuerdo con las partes que intervienen en la misma, por tanto, dependiendo de cada uno de ellos, deberemos establecer diferentes estrategias y tácticas para ejecutar nuestro mejor plan:

A lo anterior, le podemos agregar otras variables, por ejemplo: 

Por su parte, la universidad CETYS (CETYS Educación Continua, 2021) menciona más tipos de negociación: 

  1. Negociación acomodativa. 
  2. Negociación competitiva. 
  3. Negociación colaborativa. 
  4. Negociación distributiva. 
  5. Negociación por compromiso. 
  6. Negociación evitativa.

Además, existen estilos de negociación basados en la complejidad de la misma, por ejemplo, inmediatos, progresivos y situacionales (CETYS Educación Continua, 2021).

 

Negociar y negociar bien

Un elemento clave dentro de nuestro proceso es conocer perfectamente el objeto de la negociación en sus dos principales sentidos, es decir, el producto y el fin de la negociación. 
En el primer sentido, nos haremos de toda la información correspondiente a las características, cualidades, beneficios, alcances, precios, costos, requisitos, condiciones y márgenes de maniobra dentro de los cuales podemos desplazarnos. Por lo tanto, aunque debemos tener este conocimiento casi de forma memorizada, hay que tener la información física a la mano para mostrar y documentar argumentos a nuestro prospecto.  
En la actualidad contamos con diversos recursos, es decir, desde una tradicional carpeta o portafolio físico, hasta recursos digitales como memorias USB, pantallas digitales, portales informáticos y enlaces a plataformas remotas. Por ende, toda la información debe estar disponible en cualquier momento y lugar que lo requiera el cliente, por lo que debemos actualizarnos en el uso y manejo de este tipo de tecnologías.  

En el segundo sentido, debemos definir y tener muy claro el objetivo y fin de nuestra negociación, por lo que es indispensable tener claridad sobre lo que se pretende obtener al iniciar este proceso (Fournier, 2021). 
Aunque pareciera obvio que el objetivo de la negociación es la venta, colocación o aceptación de nuestro proyecto, es importante prolongar nuestra negociación y atención más allá del cierre de un trato. Por lo tanto, dentro del objeto de la negociación, debemos establecer los pasos a seguir después del cierre.  

Por ese motivo, el seguimiento a la atención, servicio y asesoría a los usuarios de algún producto han tomado una relevancia significativa, ya que buscan la lealtad del consumidor. Actualmente, el desarrollo de procesadores y programas más potentes y veloces permite una interacción inmediata entre clientes y proveedores.  

Por ejemplo, para la venta de cualquier dispositivo electrónico, ya se tiene una liga de servicio técnico y resolución de problemas mediante chatbots o diálogos interactivos para asegurar la atención del cliente una vez que son poseedores de algún artículo. 

Asimismo, tenemos que lograr la lealtad del consumidor para que no solo regrese a renovar o adquirir más bienes con nosotros, sino que nos recomiende o se convierta en nuestro representante de ventas. 
En suma, negociar es construir acuerdos para lograr un propósito de beneficio común. Por lo tanto, al realizarlo bien, se construyen negocios duraderos basados en la confianza, satisfacción y relaciones positivas. 

 

Etapas de la negociación

Aunque algunos autores hablan de cinco pasos, otros de ocho fases, etc., debemos comprender el momento que atraviesa nuestro proceso de negociación, ya que de ello depende el cambio o ajuste de tácticas. 
Esencialmente, existen solo tres momentos: 

Idealmente, debemos lograr la colocación y aceptación de nuestro proyecto con el uso y aprovechamiento de todos los recursos y técnicas disponibles para que nuestro proceso de negociación sea exitoso. Sin embargo, en caso de no lograr dicha colocación en ese momento, nuestro enfoque de negociación siempre debe ser en el tenor de la continuación y reservación para una decisión posterior.  

Entonces, los pasos de una negociación son los que tú decidas. Entre más pasos detalles, más específico serás y podrás planear mejor el ajuste y el uso de técnicas, estrategias y tácticas de acuerdo con el consumo de interés e información de tu cliente. 

 

La persuasión

La negociación implica la participación de al menos dos interlocutores, en donde cada uno de ellos tiene ciertos intereses y necesidades que no necesariamente coinciden con los de su contraparte. En consecuencia, surgen diferencias respecto a posiciones y expectativas, así como la necesidad de lograr que los posicionamientos cambien para llegar a un acuerdo.  

La persuasión es la acción que se ejerce para modificar el comportamiento, la actitud o la preferencia de otra persona. Por su parte, la persuasión positiva se basa en la empatía y en la inteligencia emocional, es decir, en habilidades sociales básicas (Nadal, 2019). 

Esta técnica consiste en identificar algunas posiciones mentales poco fortalecidas de nuestro interlocutor, para que, por medio de argumentos y evidencias (hasta cierto punto ajenas al objeto del negocio), logremos inducir un cambio en su apreciación y decisión. Es importante resaltar que el cambio logrado por esta técnica no actúa de forma consciente ni razonada. 

Estas son algunas formas en las que ejercemos la persuasión de forma diaria: 
• Dando ejemplos. 
• Explicando razones y argumentos. 
• Dando motivación por cuestiones materiales o emocionales. 
• Apelando a los sentimientos 

 

Iniciando la negociación

Estos son los puntos claves que recomendamos tener en cuenta para llegar a una negociación con una fuerte expectativa de éxito: 

Se recomienda contestar ese ejercicio de forma escrita, previo a cualquier reunión.  

 

Referencias Bibliográficas