Asegúrate de:
Si te fijas en la forma en la que se transmiten en público los mensajes de alto impacto social, verás que regularmente se acompañan de diversas expresiones del lenguaje no verbal, esto con el fin de enfatizar el sentido de la comunicación, así como su importancia.
Por ejemplo, si te centras en la arena política, podrás observar que, en los discursos de protesta históricos, se levanta el puño ante los adversarios, simbolizando el descontento del pueblo. Lo mismo sucede si te enfocas en el plano empresarial, donde verás que cuando se anuncian importantes alianzas industriales, estas por lo general se sellan ante los medios de comunicación con un fuerte apretón de manos entre los nuevos socios comerciales.
Desde esta perspectiva, es importante que, si buscas tener un impacto positivo en tu audiencia, mejores tu nivel de comunicación, a través del dominio del lenguaje no verbal, para que tu público se pueda apropiar rápida y eficazmente de tus mensajes.
En este tema te centrarás en el lenguaje no verbal como parte del proceso comunicativo. Particularmente, comprenderás en qué consisten los códigos de lenguaje no verbal: kinésico, paralingüístico y proxémico y cuáles son las recomendaciones básicas para que tu mensaje tenga el impacto que buscas al momento de interactuar con la audiencia.
Lenguaje no verbal
Instintivamente, en las primeras etapas de la vida, los seres humanos tienen la capacidad de descifrar la información no verbal que los demás les transmiten, pero dicha habilidad se va diluyendo al pasar el tiempo, conforme la mente va adquiriendo diversos roles dentro de la sociedad. Por fortuna, puedes reaprender a detectar lo que los demás te dicen sin hablar y ejercitar tu habilidad expresiva, tanto corporal como gestual.
Como ya conoces, el lenguaje no verbal es el canal de comunicación por el cual transmites la mayor cantidad de información sobre ti y tu estado de ánimo, por lo que, por encima del lenguaje oral y escrito, es el que te permite conectar con los demás. Tal como menciona Sonia El Hakim, es fundamental para lograr resultados óptimos cuando te encuentras en alguna conversación, en la gestión de un equipo y, por supuesto, cuando tienes que desenvolverte en algún escenario (ACCIÓN ESCÉNICA, 2020).
A diferencia de la percepción popular, que concibe al lenguaje no verbal como un arte perteneciente a lo subjetivo, Sonia El Hakim argumenta que se trata de una ciencia, la cual ha sido estudiada de forma metódica y rigurosa, por lo que, como toda ciencia, los resultados de su práctica obedecen a reglas establecidas, pudiendo ser medidos, evaluados y perfectibles (ACCIÓN ESCÉNICA, 2020).
Códigos del lenguaje no verbal
Algunas personas son más sensibles e intuitivas al momento de observar y escuchar a los demás. Albalat (2018) afirma que se puede intuir lo que el otro está diciendo cuando pones atención al tono de sus palabras, los gestos que hace cuando habla, la distancia que pone con relación a ti y su postura corporal.
El estudio formal del lenguaje no verbal llama “códigos” a estos medios expresivos, los cuales se explican en la siguiente tabla (Guzmán, 2018):
En el desarrollo de tus actividades frente al público, utilizarás estos tres conceptos en todo momento, pues cada uno de tus movimientos está cargado de significado, al igual que tus gestos faciales, por lo que, al tener conciencia de ellos, aquello que deseas comunicar quedará más claro.
Aunado a esto, el practicar la entonación, el volumen y el matiz que corresponde a cada frase te ayudará a que hables con fluidez y a que tus palabras adquieran mayor significado para quien las escuche.
Finalmente, es importante tener en cuenta las distancias. Por ejemplo, en un auditorio, debes procurar mantenerte en el área del centro, pues si te quedas atrás, demasiado lejos del público, estarás dando la idea de miedo e inseguridad. Por el contrario, si te acercas demasiado al proscenio, o borde del escenario, disminuirás el campo de quien te observa desde las primeras filas.
Recuerda que tu cuerpo, tu rostro, tu voz y tu ubicación en el espacio deben trabajar en conjunto, dado que son parte de un todo y deben transmitir un mismo mensaje. Para esto, Castro (2022) propone algunas recomendaciones que pueden ayudarte:
Comunicación visual
Siempre se ha dicho que los ojos son la ventana del alma, por lo que también transmiten una parte importante de aquello que quieres comunicar; tu mirada complementa la comunicación que estableces con los demás canales no verbales que tienes a tu disposición, especialmente si tus actividades se desarrollan ante un público.
El artista escénico Cristian Nila propone las siguientes recomendaciones y ejercicios para mejorar la forma en la que comunicas diferentes ideas con tus ojos (ACCIÓN ESCÉNICA, 2022):
Además, es importante que tomes en cuenta ante cuál medio te tocará expresar o transmitir un mensaje. Por ejemplo, cuando estás frente a un público, tus ojos se vuelven difíciles de percibir mientras más lejos estén las personas de ti, por lo que deberás apoyar tu mirada con ligeros movimientos de cabeza.
Considera también que, al mirar a un punto fijo hacia el fondo, amplificas la percepción que tiene el público sobre si lo estás tomando en cuenta, ya que, si fijas tu mirada en un solo sector, el resto de los espectadores pueden sentirse ignorados. La recomendación es que intercales momentos en los que focalizas una parte de la audiencia y otros en los que hablas a todo mundo en general. En caso de que tu presentación deba ser grabada, deberás procurar mantener tu mirada fija y evitar cambios bruscos en tu lenguaje no verbal.
Ahora que cuentas con la información teórica del lenguaje no verbal y tienes a tu disposición ejercicios y recomendaciones para potenciar sus beneficios en tus actividades, podrás posicionarte como una persona segura, propositiva y con cualidades de líder, además de que el mensaje que buscas transmitir conectará de forma eficaz con tu audiencia.
Tus ideas, valores, emociones y objetivos son muy importantes, así que usa los medios que tienes a tu alcance para que tu público te conozca y vea todo lo que tienes para aportar en nuevos proyectos.
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