Diseño de un producto
Figura 3. El concepto de ciclo de vida de un producto o servicio.
Fase I: ideación
En esta fase se inicia con una estrategia corporativa e influye la evaluación de desarrollos tecnológicos y objetivos del mercado. La entrada son las oportunidades que se han visualizado por parte del equipo de diseño. En esta fase se realiza un análisis de los competidores enfatizando la comparación de las características de los productos o servicios, obteniéndose una ficha genérica del producto. También se realiza un análisis del mercado donde se estudia la oferta y la demanda del producto o servicio con el fin de buscar áreas de oportunidad, se explora la propiedad intelectual en bases de datos de patentes, revistas científicas y de divulgación y, se consideran las tendencias tecnológicas del producto o servicio para determinar cuestiones tecnológicas y sus diferentes generaciones para el mercado.
Fase II: identificación de necesidades del cliente o usuario
En esta segunda fase, se busca obtener la voz del cliente, para ello, se desarrollan entrevistas y se llevan a cabo observaciones en el lugar de la acción del uso del producto o servicio. Una vez reunida la información anterior, es preciso analizarla a través de la matriz de necesidades y satisfactores, para determinar las necesidades del producto o servicios y proceder a clasificarlas en básicas, de desempeño y emoción. Lo anterior responde al método kano o kano model, que veremos en temas posteriores. Finalmente, mediante entrevistas se determina la priorización de dichas necesidades.
Fase III: especificación
La tercera fase se lleva a cabo a partir de las necesidades señaladas en la fase II, mediante la técnica del QFD (Quality Function Deployment). A través de esta técnica se obtienen la especificación del producto o servicio, el QFD permite tener los objetivos específicos a cumplir durante el desarrollo del diseño del producto o servicio, por lo que son una guía esencial para el equipo de diseño.
Fase IV: conceptualización
En la cuarta fase, es esencial contar con la especificación del producto o servicio. Esta información sirve para determinar la funcionalidad interna, mediante la técnica de descomposición funcional. Posteriormente se realiza un análisis morfológico para determinar las diferentes opciones de implementación y utilizando la matriz de Pugh se selecciona al concepto ganador con base en la satisfacción de las necesidades del cliente obtenidas en la fase II.
Fase V: diseño detallado
El resultado de esta fase es la documentación detallada del producto o servicio para que pueda usarse para su implementación en etapas posteriores. Se producen los planos, dibujos, esquemas de proceso, diagramas de flujo de software, entre otras características necesarios del propio producto o servicio.
Fase VI: evaluación del diseño
Comprende la implementación de los entregables de la etapa del diseño detallado en un prototipo para realizar pruebas al producto o servicio. Esta fase es muy importante porque genera información que permite optimizar y refinar el diseño final para que quede listo para su lanzamiento.