Contexto
En tiempos de crisis los riesgos y escenarios deben ser evaluados y revisados periódicamente, permitiendo identificar nuevos factores, ajustes en los impactos derivados de la aplicación de controles o planes de acción resultantes de análisis anteriores, cambios en la estrategia de la compañía, etc.
De acuerdo con Eduardo Saavedra (2020) las metodologías tradicionales de medición de riesgo, donde la mayoría de los casos utilizan datos históricos, como VaR o las pruebas de stress, se quedan cortos al momento de gestionar riesgos que nunca o muy pocas veces han ocurrido. Estas metodologías pierden certeza y pueden presentar resultados inadecuados para la toma de decisiones, incluso para modelos construidos con suficiente historia. Además, teniendo en cuenta que el escenario de incertidumbre actual no está incluido en la construcción de los mismos, los resultados de medición de riesgo basados en metodologías tradicionales carecen de credibilidad hoy en día.
En un mundo gobernado por la incertidumbre, la gestión del riesgo a través de escenarios se presenta como una opción que permite la toma de decisiones informada. Estos escenarios deben plantear posibles situaciones que las organizaciones enfrentarían, derivados del riesgo identificado, buscando medir su impacto en términos financieros, no como tradicionalmente se realiza, donde se habla por medio de escalas (alto, medio y bajo) y se definen rangos tan amplios que admiten demasiada subjetividad.
Explicación
Cuando evalúas un proyecto en el papel, todos los números se ven muy bonitos y cuadrados y la expectativa la mayor parte del tiempo es optimista. Sin embargo, ¿cómo incluyes condiciones de riesgo e incertidumbre en la evaluación de proyectos? Como emprendedor es común que al estimar los números olvides estos dos importantes conceptos que le dan realismo a la evaluación.
11.1 Riesgo vs. Incertidumbre
Estos 2 términos se han llegado a usar de forma indiferente, pero la verdad es que son conceptos distintos que hay que diferenciar e identificar individualmente.
La incertidumbre, según Rodríguez (2012), es un estado en el que puede ocurrir más de un suceso, pero no se sabe cuál. Uno de esos escenarios pudiera afectar el bienestar del proyecto o de la empresa. Para explicar este concepto se usan los términos de probabilidad y riesgo.
La probabilidad es la posibilidad de que se produzca un resultado determinado. Es un número entre 0 y 1 y estima un desenlace factible. Si la probabilidad de un suceso es de 0, seguramente este no ocurrirá, pero si la probabilidad es de 1, seguramente se dará.
De acuerdo con la guía PMI (2017), el riesgo es un evento o condición incierta que de ocurrir tendrá un efecto positivo o negativo en uno o más objetivos de tu proyecto, estos eventos se conocen como amenazas u oportunidades. Independientemente de la complejidad de tu proyecto deberás estar consciente de los riesgos y saber cómo actuar cuando estos se materialicen.
La siguiente imagen enlista claramente las diferencias entre ambos conceptos y además te puede brindar una idea del impacto de cada una de sus características.
Imagen recuperada de http://www.scalabble.com/2011/03/riesgo-e-incertidumbre/ Sólo para fines educativos.
Una vez que ya revisaste las definiciones de ambos conceptos, verás técnicas para poder incluirlos en el análisis de los proyectos y así r disminuir la probabilidad de riesgo e incertidumbre.
11.2 El riesgo
Un criterio práctico usado para ajustar un proyecto al riesgo es usar tasas de descuento ajustadas al riesgo. La tasa de descuento es “la tasa de exigencia del proyecto; mientras mayor sea el riesgo de éste, más elevada será la tasa mínima de rendimiento aceptable” (Rodríguez, 2012). Es decir, que los flujos del proyecto se ajustarán a una tasa mayor. Entonces cuando estés evaluando tu proyecto por el método de valor actual neto (VAN), por ejemplo, los flujos se descontarán a la tasa de descuento ajustada al riesgo que, como ya viste, es la tasa de rendimiento de un proyecto que debe ajustarse al riesgo.
Puedes preguntarte cómo es que calculas esta tasa de rendimiento ajustada al riesgo. Una de las formas es un modelo de asignación del precio de los activos de capital (MAPAC) que probablemente has escuchado como CAPM (por sus siglas en inglés). Ésta es una teoría económica que intenta relacionar el riesgo y el rendimiento.
La ecuación de este modelo es la siguiente:
Donde
re -> rentabilidad esperada
rf ->tasa de interés libre de riesgo. En México podría ser el CETES.
rm -> rentabilidad del mercado
β -> beta del activo. Mide el riesgo no diversificable y representa la sensibilidad del rendimiento de una acción a los movimientos o variaciones del mercado.
(rm – rf) -> se conoce como la prima de riesgo, pues es la rentabilidad extra requerida por los accionistas para asumir riesgos.
Rodríguez adapta este modelo económico a la evaluación de proyectos para idear la siguiente relación:
El criterio a tomar sería el siguiente: cualquier tasa interna de retorno (TIR) que esté por encima del rendimiento del proyecto será aceptada, Así mismo, cualquier valor actual neto (VAN) calculado con el rendimiento del proyecto (rproyecto) que sea positivo será aceptado.
11.3 Evaluación de incertidumbre
Como pudiste observar al principio, en la incertidumbre puede haber más de un desenlace y no se sabe cuál, por lo que existen herramientas como el análisis de escenarios y el análisis de sensibilidad que permiten prepararse para lo que pudiera resultar en un proyecto.
El análisis de escenarios consiste en “determinar la rentabilidad de un proyecto para situaciones alternativas donde los valores de las variables clave son diferentes para cada situación” (Douglas, 2000).
Por otra parte, un análisis de sensibilidad “varía parámetros clave de un proceso para determinar la sensibilidad de los resultados de la variación en cada partida” (Douglas, 2000).
La diferencia entre una técnica y otra radica en que en el análisis de escenarios se pueden modificar varios parámetros a la vez y crear infantas probabilidades. Normalmente se eligen 3 o 4 y los supuestos se basan en el contexto de la industria o país donde se vaya a llevar a cabo el proyecto. En el análisis de sensibilidad es sólo un parámetro clave (ventas, precio unitario, número de unidades). Normalmente se pueden manejar 3 situaciones: optimista, esperado y pesimista.
Ambas herramientas son similares, pues se valen de metodologías de evaluación de proyectos para hacer los escenarios y sensibilidades; VAN o TIR son las más comunes. Es decir, puedes hacer escenarios que resulten en diferentes valores de VAN y TIR. Recuerda que todo este análisis se realiza con el objetivo de validar qué tan estable es el proyecto ante posibles cambios en el contexto o en lo que tú esperabas que sucediera.
Cierre
El riesgo siempre está presente, esto es cierto tanto en la vida como en los proyectos. Si intentáramos evitar todos los riesgos, sería paralizante, por no mencionar imposible. No podríamos salir de la casa, y mucho menos embarcarnos en un proyecto. ¡Hay demasiadas cosas que podrían salir mal!
El objetivo de evaluar los riesgos es el de incrementar su probabilidad e impacto positivos y disminuir la probabilidad e impacto negativos, y así optimizar las oportunidades de éxito del proyecto. Una forma de aumentar la probabilidad de que algo suceda como lo planeaste es controlando las principales variables que tendrán un efecto en el resultado. De igual forma, también puedes cambiar los supuestos que haces con información o un análisis más certero y no únicamente porque piensas que así debe ser. Lograr que las cosas salgan según lo planeado puede darte una ventaja en tu proyecto de emprendimiento, siempre y cuando también entiendas y sepas reconocer que no todo dependerá de ti. Es decir, hay varios factores externos que no puedes controlar, por lo que debes tener la habilidad para saber adaptar tu negocio a esos cambios y seguir caminando hacia la meta propuesta.
Revisa a continuación el Checkpoint:
Antes de concluir el tema, asegúrate de responder las siguientes preguntas.
Haz clic aquí acceder a ellas.
Referencias