Contexto


¿Qué es el éxito?

En el libro Resiliencia, Ben Schneider hace una reflexión interesante acerca de este tema que interesa tanto a personas como a organizaciones.

Lo más importante es que al final de este apartado descubras cómo es importante entender al éxito de cara al tema de cultura organizacional.

De acuerdo con Schneider, el éxito siempre ha sido una preocupación para las personas y muchas no se sienten preparadas para hacer frente a la presión que el mundo pone hoy en día para lograrlo.

En sus palabras tener éxito es más que desarrollarse profesionalmente y querer ser millonario se trata de querer construir algo de valor duradero en un mundo en el que las cosas cambian a diario, y con esto, no es sólo el valor monetario que se genera con una visión de corto plazo, sino un valor perdurable en el tiempo con acciones que con responsabilidad afectan positivamente la vida de las demás personas. 

Te puedes detener aquí y pensar que esto nuevamente parece filosofía y preguntarte ¿esto qué tiene que ver con cultura organizacional?

Continúa…

Exito

Antes de los noventas = alcanzar el millón de dólares.

En los noventas = ser multimillonario a los treinta años de edad (obsesión).

Hoy = ¿estoy haciendo lo máximo posible con mi vida?

Los investigadores Howard Stevenson y Laura Nash de la Escuela de Negocios de la Universidad de Harvard, estudiaron el concepto de éxito y encontraron lo siguiente: “El éxito es diferente a ‘ser el primero’. Incluso no es todo lo que hay”.

Contexto: Esta investigación consistió en la entrevista a hombres de negocios y otras personalidades exitosas en sus respectivos campos para conocer lo que para ellos significa el éxito y sobre las decisiones que tuvieron que tomar para alcanzarlo.

Estos investigadores señalan que existen cuatro factores importantes para considerar el éxito, de acuerdo a los resultados de las entrevistas.

Los investigadores insisten en que estos factores requieren un alto nivel de práctica constante para asegurar alcanzar el éxito a plenitud.

Ellos proponen que el éxito es un estado, una combinación única de satisfacciones determinadas por cada individuo. Por esta naturaleza es inestable y no tiene una larga duración en el tiempo. Es a la vez racional y emocional. En sus hallazgos encontraron que en las personas exitosas existe también temor a no ser exitoso, a que no sería suficiente o a que tendrían que hacer algo que implicara venderse a sí mismos.

Explicación


Formación de una cultura organizacional

¿Cómo se forma una cultura organizacional?

El autor Ben Schneider sugiere que una cultura organizacional se forma como respuesta a dos retos que enfrenta toda organización:

Reto 1: La adaptación externa y la supervivencia. Reto 2: La integración interna.
Se relaciona con: modo en el que la organización encontrará un nicho y cómo hará frente a su ambiente externo constantemente cambiante.

Se relaciona con: establecimiento y mantenimiento de relaciones de trabajo efectivas entre los miembros de la organización.

Busca resolver

  • Misión y estrategia: identificar la misión principal de la organización y seleccionar estrategias para alcanzarla.
  • Metas: establecer objetivos específicos para la organización.
  • Medios: determinar la forma en que se lograrán las metas. Incluyen organización y sistema de remuneración.
  • Medición: establecimiento de criterios para medir cuán bien alcanzan las metas las personas, equipos y departamentos.

Busca resolver

  • Lenguaje y conceptos: identificar métodos de comunicación y desarrollo de significados comunes de conceptos importantes (ideología central).
  • Límites de grupos y de equipos: establecimiento de criterios para la membresía a grupos y equipos.
  • Poder y estatus: Determinar las reglas para adquirir, mantener y perder poder y posición dentro de la organización.
  • Sistema de consecuencias: desarrollar esquemas que estimulen las conductas deseables y desanimen las indeseables.



Una cultura es la suma de lo interno y de lo externo. Como profesional en el desarrollo de organizaciones, tu labor será fundamental en acompañar los procesos humanos dentro de la organización para hacer cultura.

En ocasiones apoyando el desarrollo del proceso de la estrategia pero no la elaboración de la estrategia, eso es responsabilidad del director general y su equipo directivo, pero sí es posible que con experiencia ganada en esta práctica puedas participar facilitando las conversaciones para llegar a la estrategia.

Una cultura además surge cuando:

  • Los integrantes comparten conocimientos y supuestos conforme descubren o desarrollan formas de hacer frente a los aspectos de adaptación externa e integración interna.
  • En compañías nuevas, el fundador o unos pocos integrantes clave pueden determinar en gran parte la cultura organizacional (Google, Facebook, LinkedIn). Después, ésta reflejará una mezcla de los supuestos, valores e ideas del fundador u otros de los primeros miembros directivos de nivel superior, así como del aprendizaje y las experiencias posteriores del personal.

De acuerdo a Hellriegel y Slocum (2004), el surgimiento de las culturas organizacionales sigue un esquema como el que se presenta a continuación:

Administración superior

Esta de acuerdo con criterios compartidos sobre supuestos de la conducta humana.

Desarrolla una visión compartida de valores centrales.

Conductas

Los empleados se conducen de maneras congruentes con los valores y supuestos compartidos.

Resultados

Desempeño financiero.

Participación en el mercado.

Compromiso de los empleados.

Cultura

Surge una cultura fuerte.

Se conservan las tradiciones.

Prácticas de socialización para los nuevos colaboradores.

En muchas ocasiones estos esfuerzos pueden ser intencionales de manera consiente desde la creación de la compañía. Sin embargo, conforme el tiempo pasa, la cotidianeidad también juega su papel en el impacto hacia la cultura organizacional. Es aquí que será importante practicar la observación y la crítica para entender aquellas prácticas no escritas que forman la cultura.

Fortalecimiento de cultura

Una cultura organizacional es impactada por todos los que asumen parte de la organización, se ha dicho, que ésta se da cuando se comparte por los miembros de la organización.

Pero, si no es estática ¿cómo se mantiene?

Ben Schneider en su investigación comparte que los métodos son complejos y va más allá de la selección de las personas que se ajustan al perfil organizacional y despedir a aquellos detractores culturales. Sin embargo, menciona que existen algunos indicadores poderosos a tomar en cuenta para atender, mantener y, por su puesto, fortalecer una cultura organizacional.

1. Observa aquello a lo que prestan atención administradores (directores) y equipos.


Éste es uno de los métodos más poderosos para mantener una cultura organizacional.

Esto incluye poner atención en aquellos procesos y conductas a los que los directivos, gerentes y equipos prestan atención. Los acontecimientos que se observan y comentan.

Resolver los asuntos en forma sistemática transmite a los empleados señales poderosas sobre lo que es importante y lo que se espera de ellos.

2. Pon atención en cómo reaccionan a incidentes y a las crisis

Ante una crisis, la cultura organizacional emerge, sobre todo en el manejo que le dan ejecutivos y empleados.

El manejo de una crisis puede reforzar la cultura existente o provocar el surgimiento de nuevos valores y normas que cambian la cultura en algún sentido.

A veces ante una crisis financiera, una posible decisión que suele ser casi siempre la primera es el despido de empleados, provocando una afectación en la cultura. Habiendo podido explorarse quizá la reducción en horas trabajadas antes de llegar a aquella determinación primera.

3. Descubre las enseñanza y la asesoría que se le da al empleado en sus funciones



Observa cómo los directivos tratan a su personal, dedican tiempo a educarlos en sus funciones y entienden mejor la organización para la que trabajan.

Es desfavorable cuando un empleado te deja saber que después de 3 meses en la organización aún no tiene objetivos definidos con su gerente.

4. Investiga cómo asignan los premios y estatus

Es común que los empleados aprendan acerca de la cultura organizacional interpretando las acciones relacionadas con el sistema de premiación de la compañía.

Los premios y castigos relacionados con las diversas conductas transmiten a la organización (a las personas), las prioridades y valores, tanto de administradores como de la empresa.

El sistema de estatus de la organización mantiene ciertos aspectos de su cultura.

Verifica cómo es la distribución de privilegios y qué mensajes se transmiten. Es importante decir, que en nuestro tiempo la posibilidad de compartir el trabajo entre distintas generaciones este asunto toma relevancia. Como comentario, los millennials son menos respetuosos a este tipo de consideraciones. Ellos se sienten más cómodos en un ambiente de igualdad.

Existe la creencia de que el cambio en el sistema de premiación de una organización es el método más efectivo de influir en una cultura. Si bien se logran modificar conductas, sus efectos serán de corto plazo y no incidirán con profundidad en fortalecer o integrar nuevas creencias en la cultura de una organización.

5. Entiende las prácticas de reclutamiento, selección, ascensos y despidos

Una de las formas básicas en que las organizaciones mantienen su cultura es el proceso de reclutamiento. Así también a través de los criterios utilizados para determinar qué persona es asignada a empleos o puestos específicos, quién obtiene los aumentos y los ascensos y por qué, a quién se separa de la organización mediante el despido o la jubilación anticipada, por mencionar algunas de las prácticas de administración de personal, refuerzan y demuestran aspectos básicos de una cultura.

Hoy más que nunca con la velocidad de la comunicación, estos criterios son del conocimiento de toda la organización y pueden sostener o cambiar una cultura existente.

¿Qué te puede decir de su cultura organizacional una compañía que en su proceso de reclutamiento busca acercar a los ejecutivos de la alta dirección a interactuar con jóvenes en su campus universitario?

6. Indaga acerca de los ritos y ceremonias que la organización tiene

Estos son actividades o rituales planeados con un significado cultural muy importante. Ciertas actividades de los gerentes o de los empleados pueden convertirse en rituales que con el tiempo llegarán a interpretarse como parte de la cultura organizacional. Entre los rituales y ceremonias que la respaldan están los de iniciación, descenso de posición, refuerzo e integración.

Tipo Ejemplo Posibles consecuencias
Ritos de iniciación

Entrenamiento básico

Facilita la transición a nuevas funciones, minimiza las diferencias en la forma en que las funciones se desempeñan.

Ritos de degradación

Despido de un gerente

Reduce el poder y la identidad, reafirma la conducta apropiada.

Ritos de mejoramiento

Ceremonias

Elevan el poder y la identidad, recalcan el valor de la conducta adecuada.

Ritos de integración

Fiestas de oficina

Estimulan sentimientos comunes que vinculan a los miembros entre sí.

Fuente: Hellriegel y Slocum (2004).

7. Indaga acerca de los ritos y ceremonias que la organización tiene


Muchas de las creencias y valores fundamentales de la cultura de una organización se expresan en forma de historias, algunas conversadas como leyenda que se convierten en parte de sus tradiciones, pues transmiten la cultura existente desde los miembros de la planilla más antiguos a los nuevos y resaltan los aspectos más importantes de esa cultura.

A continuación un ejemplo: “Hace 100 años que ‘fulanito’ fundó esta empresa bajo los principios de innovación, se dice de una ocasión en la que en un afán curioso buscaba como sacar provecho de la semilla de maíz para ayudar a nutrir a los enfermos de su comunidad y por accidente resolvió la fórmula del cereal y logró contribuir a la nutrición de ese tiempo, ése ha sido el legado que hoy tenemos para seguir en nuestra misión”.

Ejercicio:

¿Qué te dice de la cultura de la organización?

La estrategia de una empresa no está completa sin tomar en cuenta la cultura organizacional y sus valores centrales, porque esto impacta directamente en el comportamiento de quienes forman la organización.

Una organización busca ser exitosa, ganar en logros, ser sustentable en el tiempo y dejar un legado que trascienda su razón de ser y que sea valorado por sus miembros, clientes y sociedad. Ésta no es una tarea nada fácil pero sí exigida cada vez más en nuestros tiempos.

El éxito será entonces la suma de la estrategia, de la cultura, sus valores y la ejecución que logre el negocio en el tiempo.

Cierre


  • Buscan el éxito por razones complejas y sus motivaciones son muy emocionales.
  • Desean tener una sensación de placer en la que las relaciones son muy importantes.
  • La razón más común: “marcar una diferencia en el mundo”.
  • Quienes realmente lo han logrado, lo han hecho siendo únicos sin tratar de copiar o imitar a otros.
  • El éxito tiene un componente moral y las personas exitosas son admiradas por demostrar altos estándares morales. Basta recordar lo sucedido a los exitosos ejecutivos de Enron.
  • Aprovecharon las oportunidades cuando la vida se las presentó. Hicieron lo que pudieron con lo que tenían.
  • No tenían demasiadas cosas de qué arrepentirse y evitaron tomar decisiones que a la larga hubieran significado motivos para arrepentirse.
  • Disfrutan el “aquí y el ahora”. Son personas que disfrutan de la vida, que como saben que el atardecer no durará mucho, se detienen a contemplarlo y se sienten felices de hacerlo y de lo que en general ven en su vida. Están satisfechos.

Los autores recomiendan hacerse las siguientes preguntas para reflexionar al respecto:

Logros:

¿los logros son medidos en función de metas? Poder, riqueza, reconocimiento, competencia. Dicho de otra forma, ¿qué has sido capaz de alcanzar en cierto periodo de tiempo? ¿Qué te has propuesto y qué has cumplido? ¿Cómo lo has hecho?

Felicidad:

¿te sientes contento y complacido con tu vida?

Eventos trascendentes: ¿Impactas positivamente en otras personas?

Legado:

¿has sido capaz de transmitir tus valores y tus logros a la vida de otros? ¿Los has inspirado a ser mejor personas siendo tú a través de tus valores y logros?

No se trata de alcanzar el balance en todo, porque cada una de las esferas del éxito de acuerdo a estos investigadores, provoca emociones diferentes y en ocasiones contradictorias. Lograr provoca sentirse poderoso, capaz de vencer a la competencia. Mientras que los eventos trascendentes pueden provocar paz, serenidad.

Y los ejemplos de empresarios exitosos de acuerdo a este concepto y al estudio de los investigadores no son muchos. Casi siempre la confusión al respecto de considerar a un empresario que la da la vuelta al negocio, en el que los resultados son sorprendentes nubla la mirada porque por otro lado, este mismo ejecutivo puede estar no tener en claro el impacto de sus acciones en su entorno interno y externo. Sin embargo, los investigadores al crear los perfiles de éxito de la gente que han estudiado destacan, por ejemplo, el perfil de Bono de U2 no sólo como el rockero que logra abarrotar todos sus conciertos, sino que también ha abierto brecha en la labor humanitaria, logrando alianzas importantes con Bill y Melinda Gates, haciendo que su perfil de éxito sea muy completo.

Por lo que aquel ejecutivo o director general que dimensiona adecuadamente sus logros, cuidando cómo estos influyen sobre su entorno, cómo a la vez de ayudar al protagonista, trasciende sobre sus colaboradores, familia y sociedad, logrará una gran satisfacción que por un lado le proporcionará felicidad y, por otro, dejará un legado.

Checkpoint


Instrucciones: Da clic en las preguntas para conocer la respuesta

Cuando los integrantes comparten conocimientos y supuestos conforme descubren o desarrollan formas de hacer frente a los aspectos de adaptación externa e integración interna.

Una cultura organizacional es impactada por todos los que asumen parte de la organización, se ha dicho que ésta se da cuando se comparte por los miembros de la organización.

Referencias


  • French, W. (2006). Desarrollo Organizacional. México: Prentice Hall.
  • Hernández, J. (2011). Desarrollo Organizacional. México: Pearson.
  • Schneider, B. (2007). Resiliencia. Madrid, España: Norma.