Modelos mentales
La responsabilidad se puede definir como la habilidad para responder ante un determinado estímulo. Es importante destacar que aun cuando hay muchas posibilidades para responder, regularmente se utiliza la misma. Todos los seres humanos tenemos hábitos, y la conciencia te permite identificar aquellos que no te favorecen, para cambiarlos.
Actuar con responsabilidad implica no culpar a otras personas de lo que pudiera estar ocurriendo como consecuencia de una acción que se realizó de forma personal dentro de las actividades laborales.
De acuerdo con Jeffers (2007), asumir la responsabilidad implica:
Cierre
Existe un requisito fundamental para lograr la expansión de la conciencia: el conocimiento de sí mismo, el dejar a un lado el tener y el hacer, para reconectarse con la esencia del ser, que vibra a la misma frecuencia de esa conciencia superior. Para lograrlo se requiere de la observación, cambiando el foco de atención, dejando de ver hacia afuera y explorar lo que hay hacia dentro, descubriendo a cada momento el poder personal y utilizándolo de forma inteligente para dejar una huella positiva en todo.
La autoestima es un poderoso elemento para la realización personal, puesto que impacta directamente la confianza, la autonomía y la independencia. El aprendizaje es un catalizador de la socialización del ser humano en las diferentes etapas de su desarrollo biológico, facilitando la interacción con otras personas y adquiriendo también ciertos comportamientos. Cabe destacar que no solo se aprende, sino también se desaprende aquello que ya no nos es útil o concordante con las creencias que se tienen.
¿Por qué cuesta tanto trabajo mirar hacia dentro de sí mismo? ¿Por qué las personas tienden a evadir su responsabilidad culpando a otros de lo que les sucede? ¿Por qué las personas tienen comportamientos contrarios a lo que creen?
Referencias bibliográficas