El cambio es la modificación de un estado, condición o situación. Es una transformación de características, una alteración de dimensiones o de aspectos significativos.
El reconocer y aceptar el cambio es activar el motor de la renovación y del progreso, el detenerlo o ignorarlo es aferrarse a nuestros logros y obstáculos del pasado.
El propósito no es algo que tú creas, tú lo descubres al prestar atención a donde tu vida es más satisfactoria y donde encuentras mayor felicidad y significado.
Cuando somos conscientes de nuestro propósito, nos damos cuenta que es el eje desde donde diriges tu vida. La vida con propósito es energizante y te proporciona claridad en todas las decisiones que tomas en tu vida.
Visión viene del latín videre que significa ver.
Crear una visión es ver la imagen de cómo quieres verte en el futuro y descubrir cuál es tu propósito fundamental en la vida, para iniciar tu desarrollo y el desempeño de tus actividades teniendo un fin en mente (Covey, 2011).
Teniendo como marco tus propios principios, la visión requiere no sólo un sueño, sino el compromiso con tu visión y el análisis de tu situación real que estimula u obstaculiza el logro de tus objetivos.