Rubén es el jefe de un equipo de despachantes en un almacén de refacciones. El equipo está compuesto por seis despachantes y un coordinador. Un día hablando con el coordinador del almacén, se entera de que existe una rivalidad entre los despachantes, pues hay un bando conformado por tres despachantes que siempre acaparan el montacargas y esto no les permite a los otros realizar a tiempo sus envíos. Rubén había notado que siempre eran los mismos tres los que se quedaban trabajando hasta tarde, mientras que el otro grupo realiza siempre a tiempo sus pedidos. Él entiende que debe tomar cartas en el asunto antes que el conflicto escale. No comprende cuál es la razón por la que sólo algunos pueden hacer uso del montacargas y si existe alguna razón más profunda por la que los seis despachantes no puedan compartir el montacargas.
El gerente de ventas de una empresa automotriz está a punto de cerrar un gran trato con uno de sus distribuidores. Este distribuidor tiene dificultades para la compra de autos ya que su situación financiera es complicada. El vendedor igualmente desea venderle a su cliente el pedido, pero para esto deberá llegar a un acuerdo con el departamento de Crédito y Cobranza, donde existe una gran negativa a hacer esta venta, ya que saben que el adeudo a futuro pasará a ser incobrable. Ambos departamentos quieren facturar la venta sin arriesgar la salud financiera de la empresa y de su cliente. Crédito y Cobranza propone que el distribuidor dé un enganche del 50% de su compra. El departamento de Ventas y el cliente aceptan el acuerdo y finalmente la venta es posible.