Contexto
¿Has escuchado canciones que incluyan la palabra “gracias”?
A continuación te invitamos a que escuches algunos ejemplos…
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MercedesSosaVEVO (2016, 20 jul.) Mercedes Sosa - Gracias A La Vida [Archivo de video].
Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=ntma-uqeGpw
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AbbaVEVO (2010, 23 feb.) Abba - Thank You For The Music [Archivo de video].
Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=0dcbw4IEY5w
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WarnerMusicMexico (2011, 5 dic.) Alexander Acha - Gracias (Video Oficial) [Archivo de video].
Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=VikUg7__BgQ
En este tema verás que la gratitud es un tema de estudio de la psicología positiva y un fenómeno que se correlaciona muy altamente con la felicidad. Los ejercicios te invitarán a explorar el papel de la gratitud en tu vida.
Te invitamos a que busques más canciones relacionadas con el tema de la gratitud.
Explicación
Piensa en el día de hoy…
¿Cuántas veces te han dicho “gracias” este día? ¿Cuántas veces le has dado las gracias a alguien?
Puede que se trate de un formalismo social, algo que decimos tan automáticamente que casi no nos damos cuenta. Pero aun así, cuando una persona no nos da las gracias, lo notamos y generalmente es incómodo.
Cuando la gratitud es más que una reacción automática, cuando nos sentimos verdaderamente agradecidos, tenemos una experiencia profunda y potente, que implica tanto a nuestro cerebro como a nuestro corazón.
La gratitud es tanto una emoción positiva, como una fortaleza de carácter, es una experiencia afectiva, algo que sentimos en diferentes momentos; también puede ser un rasgo, una forma habitual de ser de una persona que frecuentemente siente y expresa agradecimiento.
4.1 La importancia de la gratitud en la historia y la cultura
La gratitud ha sido valorada a través de la historia como una virtud importante. Dentro de muchas tradiciones espirituales como el judaísmo, el budismo, el hinduismo y el cristianismo se le da un lugar importante a la gratitud.
La palabra “gratitud” viene del latín gratia que quiere decir: favor, regalo o placentero. Estas palabras abarcan qué es la gratitud: el darnos cuenta de que recibimos “regalos” de la vida sin que necesariamente hayamos hecho algo para merecerlos. Además, sentir agradecimiento es placentero, nos hace sentir bien (Emmons & Shelton, 2002).
Muchos autores clásicos hablan de cultivar la gratitud para el bienestar individual y social, y consideran que el agradecimiento contribuye a la felicidad personal, a las relaciones con los demás y al buen funcionamiento de la vida colectiva. A nivel psicológico, la gratitud tiene que ver con un agradecimiento y aprecio por la vida, y puede expresarse hacia otras personas, hacia la naturaleza o Dios.
Abraham Maslow decía que una de las características de las personas autorealizadas (aquellas que logran desarrollar sus potencialidades y alcanzan sus aspiraciones más deseadas) era precisamente el asombro y aprecio por la vida, y que la capacidad para sentir y expresar gratitud es fundamental para la salud emocional (Emmons & Shelton, 2002).
4.2 Investigaciones sobre la gratitud
Como sabes, la psicología positiva es el estudio científico del bienestar y de lo que hace que las personas vivan plenamente. La gratitud es uno de los temas más importantes dentro de la psicología positiva porque es una variable que se correlaciona de manera directa con la felicidad. Muchas investigaciones han encontrado que las personas que sienten y expresan más gratitud tienen niveles más altos de satisfacción y de felicidad.
Uno de los investigadores que más ha estudiado el tema del agradecimiento es el Dr. Robert Emmons, profesor de la Universidad de California, Davis (EUA), junto con su colega Michael McCullough, psicólogo de la Universidad de Miami (EUA). El Dr. Emmons ha descubierto que cultivar la gratitud puede tener un gran impacto positivo en diferentes áreas de la vida de las personas, desde sus relaciones con los demás hasta su salud física.
La gratitud puede relacionarse con la felicidad de diferentes maneras (Watkins, Van Gelder, & Frías, 2009):
Podemos sentirnos agradecidos con la vida, con Dios o con otra persona, pero no es posible sentirse agradecido con uno mismo. Esta hace a la gratitud diferente de otras emociones: alguien se puede enojar consigo mismo, o al revés, sentirse orgulloso de sí, pero no agradecido consigo. La gratitud siempre implica la sensación de regalo, de haber recibido algo. Estos autores también señalan que la gratitud es una virtud cívica, porque al sentirse agradecida, la persona está motivada para comportarse de forma pro-social o moral (preocupada por los demás).
4.3 Cultivar la gratitud
Como las otras virtudes y fortalezas, la gratitud se puede cultivar. Todos nos podemos beneficiar de sentir y expresar nuestro agradecimiento. Se han hecho investigaciones para ver si ciertos ejercicios o intervenciones positivas para promover la gratitud tienen un impacto sobre la felicidad.
En la primera de estas intervenciones positivas se trata de llevar un diario de gratitud.
Este ejercicio consiste en tener un cuaderno en el que cada noche, antes de dormir, anotemos de qué nos sentimos agradecidos ese día; hay diferentes variaciones.
Seligman, Steen, Park & Peterson (2005) le llaman el ejercicio de “3 cosas buenas”, y hay que escribir cuáles fueron algunas de las cosas buenas que sucedieron en el día y por qué pensamos que se dieron.
El Dr. Martin Seligman y sus colaboradores han comprobado que un grupo de personas que sufrían de depresión mejoró notablemente sus síntomas al hacer este ejercicio durante una semana.
Robert Emmons (2007) ha estudiado los efectos de un ejercicio llamado contar las bendiciones, en el que los participantes escriben una vez a la semana 5 cosas de las que se sienten agradecidos, durante 10 semanas.
La Dra. Sonja Lyubomirsky también ha estudiado los diarios de gratitud, y ella recomienda escribir entre 3 y 5 cosas de las que uno se siente agradecido, bien sea en la mañana o en la noche, cuando uno pueda tomarse unos minutos de tranquilidad para hacerlo.
Sus estudios indican que la frecuencia deseable no es la misma para todas las personas, generalmente se puede hacer una vez a la semana durante varias semanas, diariamente o tres veces por semana; lo importante es que el ejercicio no se vuelva rutinario, que sea una experiencia significativa (Lyubomirsky, 2007).
Visita de gratitud
Otra intervención positiva es la visita de gratitud y consiste en lo siguiente: pensar en alguna persona con quien nos sintamos agradecidos y a quien no le hayamos expresado suficiente gratitud. Escribirle una carta en la que le demos las gracias y le digamos exactamente por qué nos sentimos agradecidos con ella. Después contactamos a la persona y la invitamos a reunirse con nosotros; por ejemplo, a tomar un café o a desayunar, sin decirle el motivo de la reunión (ojo: no hay que mandar la carta por correo). Cuando nos reunimos con esa persona, le leemos en voz alta la carta, y una vez leída, se la damos. El equipo de investigadores de Seligman (Seligman et al., 2005) encontró que realizar esta visita de gratitud también disminuía significativamente los niveles de depresión de las personas y aumentaba los niveles de felicidad.
La Dra. Barbara Fredrickson de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill (EUA) ha estudiado la gratitud como una de las formas de la positividad. Ella propone que podemos tener rituales de gratitud en nuestra vida cotidiana; por ejemplo:
Fredrickson propone diferentes actividades para cultivar la gratitud, estas consisten en:
Te invito a explorar tus redes favoritas y ver qué hay en ellas relacionado con la gratitud.
Cierre
Sentir agradecimiento y expresarlo puede contribuir de manera significativa a nuestra felicidad. Hay muchas maneras de cultivar la gratitud, piensa en las que ya practicas y prueba una nueva de las mencionadas en este tema.
Para terminar este tema, te invitamos a que escojas y escuches una canción en la que el tema de la gratitud sea central.
Revisa a continuación el Checkpoint:
Asegúrate de comprender:
Referencias