En El Palacio de Hierro trabajaba Santiago, un joven que poseía una gran ambición y determinación. Sin embargo, su falta de autocontrol era un obstáculo que le impedía alcanzar sus metas. Él se propuso superar esta actitud, por lo que se planteó desarrollar la autodisciplina y el autocontrol. Santiago se comprometió a seguir una rutina diaria estricta y a mantenerse enfocado en sus objetivos. Sin embargo, la verdadera prueba llegó cuando enfrentó desafíos emocionales que amenazaban con sabotear su progreso. Por esta razón, comenzó a practicar la meditación y la autoaceptación, además aprendió a controlar sus emociones y a tomar decisiones conscientes en lugar de dejarse llevar por sus impulsos.
Aunque a veces caía en la procrastinación, Santiago recordaba que la disciplina era la clave para superar este obstáculo. Con determinación y perseverancia, logró vencer sus malos hábitos y alcanzó el éxito que siempre había soñado. Así, Santiago se convirtió en un ejemplo de autocontrol en El Palacio de Hierro y para aquellos que luchaban por alcanzar sus metas.
Se detonan las siguientes preguntas: ¿cómo afecta el autocontrol, la productividad y eficiencia de los colaboradores en una empresa como El Palacio de Hierro? ¿Qué estrategias y herramientas se pueden implementar dentro de El Palacio de Hierro para fomentar la autodisciplina y autocontrol emocional en los empleados y mejorar su desempeño laboral?
Autodisciplina y autocontrol
La autodisciplina es la capacidad de establecer metas claras y trabajar de manera constante para alcanzarlas. Esto implica mantener el enfoque en el objetivo final y resistir las distracciones o tentaciones que puedan surgir durante el trayecto. Además, la autodisciplina requiere establecer límites y tener la capacidad de decir “no” a aquellas actividades o comportamientos que no te acercan a tus metas (Asociación Valenciana de Educación Emocional y Creatividad, 2024).
Por otro lado, el autocontrol se refiere a la capacidad de controlar las emociones y comportamientos en situaciones desafiantes. Esto implica ser consciente de las reacciones automáticas y ser capaz de tomar decisiones basadas en la razón y no en la impulsividad. El autocontrol también implica la capacidad de resistir las tentaciones y mantenerse firme en las decisiones, incluso cuando pueda resultar difícil o incómodo (Asociación Valenciana de Educación Emocional y Creatividad, 2024).
La autodisciplina y el autocontrol son fundamentales en el ámbito laboral por varias razones:
Figura 1. Beneficios del autocontrol.
Morrillo, A. (2024). Aprende sobre la autodisciplina y el autocontrol: claves para alcanzar tus metas. Recuperado de https://aveec.org/pensamiento-critico/que-es-la-autodisciplina-y-autocontrol/?expanded_article=1
Bajo esta perspectiva, la autodisciplina y el autocontrol son habilidades cruciales en el ámbito laboral porque contribuyen directamente a mejorar el rendimiento individual y cuando se ponen en práctica, también trae beneficios en el ámbito personal.
Autocontrol emocional e impulsos
El autocontrol emocional es la capacidad que permite gestionar de forma adecuada las emociones y evita que estas controlen a las personas. Por otro parte, el impulso puede referirse a las fuerzas o motivaciones que llevan a las personas a participar en comportamientos negativos (Castro, 2024).
Tener un buen control de las propias emociones no es fácil, pero sí puedes practicar y aprender qué acciones son buenas y cuáles no tan buenas para mejorar. A continuación, se presentan técnicas para el autocontrol (Castro, 2024):
La voluntad y los hábitos
La mayor parte de las acciones se derivan de hábitos inconscientes, y lo mismo sucede con las decisiones, que a menudo se cree que son racionales, pero no lo son. Muchas de estas decisiones no resultan ser completamente positivas. Por ejemplo, los hábitos alimenticios y las rutinas diarias en el trabajo tienen un impacto innegable en la vida de cada individuo. Por lo tanto, los hábitos ejercen un control significativo sobre la vida de las personas.
De acuerdo con la Real Academia Española (s.f.-a), un hábito se define, como “modo especial de proceder o conducirse adquirido por repetición de actos iguales o semejantes, u originado por tendencias instintivas”. Por otro lado, la Real Academia Española (s.f.-c) señala que la voluntad es la “facultad de decidir y ordenar la propia conducta”. Por lo tanto, la voluntad puede llevar a una persona a cumplir sus objetivos.
Además, la voluntad se relaciona fuertemente con la planificación y el autocontrol. Si se piensa que no se cuenta con ella o que se tiene muy poca se puede trabajar, por ejemplo, como un músculo que se puede ejercitar y seguir desarrollando.
Frecuentemente se asume que cambiar el estilo de vida implica realizar ajustes significativos o establecer grandes propósitos para el futuro. Nada más lejos de la realidad. El cambio real proviene del resultado de cientos de pequeñas decisiones, por ejemplo: hacer dos flexiones al día, levantarte cinco minutos antes o hacer esa corta llamada telefónica que no dejas de posponer (López, 2023).
Por otro lado, López (2023) menciona el método Clear para desarrollar nuevos hábitos. Está conformado por cuatro pasos: la señal, el anhelo, la respuesta y la recompensa. Se trata de un sistema respaldado por evidencia científica, diseñado para impulsar el cambio de comportamiento, eliminando los malos hábitos y fomentando la incorporación consistente de nuevos hábitos en la vida. Este sistema se fundamenta en cuatro leyes:
Cultivar buenos hábitos es fundamental para alcanzar el éxito y la satisfacción en la vida. Al adoptar una mentalidad proactiva y enfocarse en desarrollar rutinas positivas, puedes mejorar tu productividad, salud y bienestar general. A través de la consistencia y el compromiso con el cambio, es posible transformar gradualmente tu vida y alcanzar tus objetivos. Recuerda que cada pequeño paso hacia la formación de buenos hábitos te acerca más a una vida más plena y significativa.
La procrastinación
De acuerdo con la Real Academia Española (s.f.-b), procrastinar significa “diferir o aplazar”. Es un comportamiento caracterizado por aplazar actividades importantes o urgentes en favor de otras tareas menos prioritarias o placenteras, a menudo por la falta de motivación, miedo al fracaso, ansiedad, o simplemente por la tendencia a buscar gratificación inmediata.
Por otro lado, la procrastinación puede convertirse en un hábito perjudicial que afecta la productividad, el rendimiento académico, las relaciones personales y el bienestar general. Las personas que procrastinan tienden a experimentar estrés y culpa debido a las tareas no completadas, lo que puede generar un ciclo de evitación y postergación continua.
Para superar la procrastinación, es importante identificar las causas subyacentes, establecer metas claras y alcanzables, dividir las tareas en pasos más pequeños y manejables, y desarrollar estrategias efectivas de gestión del tiempo y motivación personal
Martins (2024) da algunas recomendaciones para dejar la procrastinación:
Figura 2. Recomendaciones para dejar la procrastinación.
Con esto, se plantea la oportunidad de adoptar estas recomendaciones siempre y cuando se cuente con la determinación necesaria. No funciona mediante imposiciones; solo será efectivo para aquellos que, impulsados por el deseo respaldado por la voluntad, decidan creer en sí mismos y alcanzar sus metas.
La capacidad de practicar el autocontrol, desarrollar buenos hábitos y mantener la autodisciplina es fundamental para alcanzar el éxito y la eficiencia en cualquier entorno laboral, incluido el dinámico ambiente de El Palacio de Hierro. Como observaste en el ejemplo de Santiago, su disciplina le permitió mejorar sus hábitos.
Practicar el autocontrol permite resistir las distracciones y tomar decisiones más conscientes, mientras que desarrollar buenos hábitos ayuda a mantener una rutina eficaz y positiva en el trabajo.
La autodisciplina te impulsa a perseverar hacia tus metas a pesar de los desafíos y las dificultades que puedan surgir. Al integrar estas habilidades en tu vida laboral, puedes mejorar tu desempeño, fortalecer tus habilidades de liderazgo y promover un ambiente de trabajo más productivo y eficiente en El Palacio de Hierro y en cualquier otro lugar.
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