Como puedes darte cuenta, el pensamiento crítico no es cualquier tipo de pensamiento sino que amerita de algunas funciones, habilidades y características que, aunque todos podemos desarrollarlas, no todos ponemos en acción al momento de pensar.

En la historia de la humanidad, pero sobre todo en el presente que vivimos tan llenos de conflictos en todos los ámbitos, los expertos coinciden en destacar la importancia de desarrollar el pensamiento crítico.

Los beneficios que se pueden obtener mediante el pensamiento crítico son los siguientes:

• Tener una mejor preparación académica.
• Ser mejores profesionistas.
• Aspirar a mejores empleos.
• Tener mejor calidad de vida.
• Ser ciudadanos más conscientes, responsables y participativos, sobre todo, en la construcción de una sociedad más justa, equilibrada y evolucionada.

¿Cuándo es conveniente formarnos como pensadores críticos?
Lo ideal es que desde los primeros años escolares se fomente el desarrollo de estas habilidades; sin embargo no es una tarea exclusiva de la escuela. De manera individual, en la familia, con los grupos de amigos puede desarrollarse el pensamiento crítico. Ahora que decidiste ingresar a este curso, es tu momento  ideal para aceptar vivir una experiencia de aprendizaje que te puede brindar muchos beneficios.

¿Dónde y cómo se puede desarrollar el pensamiento crítico?
En el salón de clases, fomentando un clima de tolerancia y respeto, permitiendo a los alumnos cuestionar, experimentar, manipular materiales. Ayudándolos a elaborar sus propias respuestas, evitando caer en el “cada uno tiene su verdad”; lo que hay que hacer es valorar los diferentes puntos de vista, orientarle, proporcionarle acompañamiento y guía. 

Tal vez estés pensando que esto es algo muy complejo para niños pequeños pero en algunos centros educativos de Canadá y Estados Unidos se han implementado programas de filosofía para niños, los cuales fomentan el ejercicio del pensamiento crítico en niños de nivel primaria.

Los enfoques de la vida y del vivir que caracterizan el pensamiento crítico incluyen:

• Curiosidad respecto a una amplia gama de asuntos.
• Preocupación por estar y mantenerse bien informado.
• Estado de alerta frente a oportunidades para utilizar el pensamiento crítico.
• Confianza en los procesos de investigación razonados.
• Autoconfianza en las propias habilidades para razonar.
• Mente abierta respecto a visiones divergentes del mundo.
• Flexibilidad al considerar alternativas y opiniones.
• Comprensión de las opiniones de otras personas.
• Imparcialidad en la valoración del razonamiento.
• Honestidad al enfrentar las propias predisposiciones.
• Prejuicios, estereotipos o tendencias egocéntricas.
• Prudencia al postergar, realizar o alterar juicios.

En este momento cuentas con una referencia para que realices una autoevaluación y te preguntes ¿cuáles habilidades de pensamiento y disposiciones tengo para el pensamiento crítico?

1. Humildad intelectual
   Es la capacidad de reconocer los límites de nuestro conocimiento, ser sensibles a situaciones en las que nuestro egocentrismo, prejuicios y limitaciones de punto de vista nos llevan por el camino equivocado.
2. Entereza intelectual
   Es tener el valor intelectual de reconocer que las ideas peligrosas o absurdas pueden estar justificadas racionalmente (del todo o en parte), y que algunas de las conclusiones o creencias que nos han inculcado pueden ser falsas o confusas.
3. Empatía intelectual
   Consiste en tener la conciencia de saber ponerse en el lugar del otro para entenderlo verdaderamente; es la habilidad de reconstruir con precisión los puntos de vista y los razonamientos de otros y razonar desde las premisas, suposiciones e ideas diferentes a las nuestras.
4. Autonomía intelectual
   Consiste en ejercer un dominio racional sobre nuestros propios valores y creencias. Implica el compromiso de tomar como referencia la razón y la evidencia.
5. Integridad intelectual
   Significa ser honesto y justo con nuestros propios pensamientos, aplicarles los mismos estándares intelectuales, someterlos al mismo rigor de evidencia y prueba que aplicamos con los de otros y admitir honestamente las discrepancias e inconsistencias de nuestros propios pensamientos y acciones.
6. Perseverancia intelectual
   Consiste en la necesidad de perseguir un conocimiento intelectual y la verdad, aún consciente de las dificultades, obstáculos y frustraciones; es el adherirse a los principios racionales a pesar de la oposición de otros.
7. Confianza en la razón
   Consiste en confiar en que, a largo plazo, los intereses de la humanidad en general y de nosotros en lo particular, estarán mejor si prevalece la razón.
8. Imparcialidad
   Significa la conciencia del trato equitativo y con los mismos estándares intelectuales a todos los puntos de vista, sin importar los propios sentimientos o más profundos intereses de uno mismo, de los amigos, de la comunidad ni de la nación propia.

Otra manera de evaluar el pensamiento crítico es aplicar los estándares intelectuales propuestos por Elder y Paul (2006); los estándares son nueve cualidades que deben tener el pensamiento y son: claridad, exactitud, precisión, relevancia, profundidad, amplitud, lógica, importancia y justicia.

Cuando pretendemos desarrollar el pensamiento crítico en nosotros mismos o en otras personas debemos formar el hábito de hacer preguntas para clarificar lo que estamos pensando, esto ayuda a responsabilizarnos del proceso o del resultado del razonamiento y al hacernos conscientes de éstos podemos lograr gradualmente que nuestro pensamiento cumpla con los estándares intelectuales universales.